domingo, 17 de marzo de 2019

El caso de Emily Rose

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¿Un exorcismo que fracasó y terminó en muerte o designios de Dios?

Anneliese Michel es el nombre de la chica que fue exorcizada y que permitió la realización de la conocida película El Exorcismo de Emily Rose.



Los no creyentes es los exorcismos, se inclinan por la hipótesis de que se trataba de una enferma mental que finalmente murió por deshidratación y las tácticas empleadas por los exorcistas y sus padres, tal como así expresó el Tribunal que terminó por condenar a los padres y a los dos exorcistas intervinientes.


Otros, los creyentes en estas historias, defienden a los padres, los exorcistas – padres Alt y Renz –, y otros expertos como, el Padre Antonio Fortea (autor de un libro contando el caso).

Nacida el 21 de septiembre de 1952, Anneliese Michel disfrutó de una vida normal, y fue instruída religiosamente desde pequeña.

En 1968, a los 16 años de edad, comienza a sufrir terribles convulsiones y quebrando su cuerpo sin control. Josef y Anna, sus padres, la trasladan con rapidez a la Clínica Psiquiátrica Wurzburg. Las pruebas realizadas en ese momento dictaminaron que padecía epilepsia.
El tratamiento proporcionado no solo no consigue mejorar su estado sino que empeora: un proceso de depresiones y toma de pastillas entre ellas varios psicotrópicos, no contribuyen a su cura. Anneliese confirmas que empieza a tener visiones diabólicas y afirmar que está poseída,

Tras años de tratamiento sin mejora, llevan a Anneliese a aceptar que las medicinas son la solución. Ella trata de explicar a los doctores que varios demonios la obligan a convulsionarse y a realizar actos horrendos. 

Es la propia Anneliese quien solicita ayuda espiritual, y un exorcismo. De primeras se le deniega el ritual, y se prueba la periciacina, que solo provoca mas convulsiones.

Las alucinaciones auditivas, "las voces", comenzaron a perseguir a Anneliese diciéndole que iba a “quemarse en el infierno”. Ella le mencionó los “demonios” a los médicos solo una vez, explicándoles que habían comenzado a darle ordenes. Los doctores severamente preocupados se veían incapaces de ayudarla.

Ya en 1973 sus padres acuden a varios pastores en busca de ayuda, pero en principio reciben una negativa en la ayuda e insisten en que sigan confiando en los médicos, pero si que les informan sobre los requisitos que la Iglesia pide para realizar un exorcismo.

Fue el 24 de septiembre de 1975, cuando Anneliese Michel recibe el primer exorcismo de los varios que se le practicaron. Fue el Obispo de la Dioscesis Stang quien otorgó permiso a dos sacerdotes Católicos, al Padre Ernst Alt y el Padre Arnold Renz para que le aplicaran durante 10 meses el rito oficial, para quitar de Anneliese los seis demonios de los que se creían la habían poseído.

Los procedimientos normales dicen que no se puede, pero en esta ocasión casi todos los exorcismos fueron grabados en una cinta, que por supuesto acabaron “filtrados” al público.

Para que el obispo reconozca una Infestatio la persona debe tener aversión a objetos religiosos, demostrar ‘sansonismo’ o fuerza desmesurada y padecer ‘xenoglosia’, la capacidad de hablar en idiomas que desconoce. 


En 1974, después de comprobar estos puntos en Anneliese, el Padre Ernst Alt solicita permiso al Obispo de Wurzburg para realizar un exorcismo. La petición fue denegada con la recomendación de que Anneliese debería vivir un estilo de vida religioso en regla para encontrar paz. Pero la chica no hacía más que empeorar.

La conducta de Anneliese se volvió violenta para con los demás, agrediendo con golpes y mordiscos a la gente.

Tampoco comía pues según ella los demonios no se lo permitían. Anneliese dormía en el suelo, comía arañas, moscas, carbón y bebía su orina. De repente le dió por gritar, tanto que llegó a escupir sangre, todo un proceso hasta la automutilación, golpeándose contra las paredes y los muebles. 

Se volvió a examinar a la chica y y porfin el Obispo de Wurzburg, Josef Stang, asignó al Padre Arnold Renz y al Padre Ernst Alt la orden de llevar a cabo el exorcismo sobre Anneliese Michel.

La base para este ritual está en el Rituale Romanum, el cual continúa siendo, a día de hoy, un Derecho Canónico válido desde el siglo XVII. Se les planteaba una tarea terrible, ya que Anneliese no decía estar poseída por un demonio, sino por 6: Lucifer, Judas Iscariote, Nerón, Caín, Hitler, y Fleischmann, un deshonrado sacerdote franco del siglo XVI, junto a algunas otras almas malditas.

Desde septiembre del 75 hasta julio del 76 se realizaron una o dos sesiones de exorcismo cada semana. Algunos ataques de la joven fueron de tal violencia que no podía ser reducida ni por tres hombres, ni incluso encadenada.

Anneliese era capaz de saltar casi un metro de rodilla, y envió a su padre y al sacerdote al otro extremo de la habitación de un solo golpe. Logró alternar momentos de normalidad cuando pudo regresar a la escuela y realizar los exámenes finales en la Academia de Pedagogía de Warzburg.

Pero los ataques en sí empeoraban. Anneliese llegaba a perder el conocimiento y se quedarse rígida. 

Llegó a romperse las rodillas un día que realizó 600 genuflexiones durante un exorcismo. Son muchas las fotos que reflejan su deterioro: la nariz rota por golpear su rostro contra la pared, dientes rotos, calvas en el pelo, docenas de heridas y cortes abiertos, ojos inflamados, necrosis, malnutrición… Sin mencionar las lesiones internas. Alrededor de 40 cintas de audio se grabaron durante el proceso.

Anneliese contó que tuvo varias visiones, y señaló el 1 de julio de 1976 como “día de la liberación”.

El 30 de junio de 1976 con una grave neumonía, fiebre, exhausta e incapaz de realizar por si misma las genuflexiones, pide absolución a los sacerdotes.

Anna graba todo y oye a su hija decirle “Mamá, estoy muy asustada”. Anneliese dijo que a medianoche los demonios la abandonarían, y es en ese momento cuando, con el rostro sereno, se sume en un profundo sueño.

Anneliese Michel fallece el 1 de julio. Al mediodía el pastor Ernst Alt informó a las autoridades de Aschaffenburg del fallecimiento, y es cuando el fiscal comenzó a investigar.

Los padres de la chica y los dos exorcistas fueron acusados de homicidio por negligencia. El juicio comenzó el 30 de Marzo de 1978, conocido como El caso Klingenberg, que se decidió en base a dos preguntas: ¿qué causó la muerte de Anneliese y quien fue el responsable?

Como dijimos las pruebas forenses determinaron que Anneliese murió por malnutrición y deshidratación. Especialistas afirmaron que si los acusados hubieran alimentado a la joven a la fuerza una semana antes de su muerte, la vida de la joven hubiera podido salvarse. Una hermana de la chica declaro en el juicio que su hermana no quería que la ingresaran en un hospital mental, donde sería sedada y obligada a comer.

Los exorcistas trataron de probar la presencia de los demonios, exibiendo las cintas grabadas en las que se oían extraños diálogos, como el de dos demonios que discutían sobre cual de los dos debería abandonar primero el cuerpo de la chica. Uno de ellos se llamó a si mismo Hitler, y hablaba con acento alemán propio de Austria.

Es curioso como las grabaciones muestran dos voces distintas pero simultáneas, emitidas a la vez por Anneliese, sin olvidar su dominio de idiomas que, en teoría, desconocía.

Con todo, era información accesible para cualquiera que quisiera fingir, pese a ser una imitación perfecta. 

Esto demostraría la teoría de la Inducción Doctrinaria presentada por los psiquiatras: según ellos los curas proporcionaron a la chica los contenidos de su conducta psicótica, y a insinuación produjo que Anneliese aceptase que su conducta era una forma de posesión demoníaca.

Los psiquiatras añadieron que el desarrollo sexual inestable de la joven junto con su diagnóstico de trastorno en el lóbulo frontal agravó su psicosis. Ello valió para que padres y exorcistas fueran declarados culpables de homicidio por negligencia y negación de auxilio. La condena fue de 6 meses de prisión con libertad condicional.

Una comisión de la Conferencia Alemana concluyó después que Anneliese Michel no estaba poseída. Pero los creyentes no dejaron de apoyarla en sus luchas, y fue porque muchos creían que el cuerpo de la chica no encontraría la paz ni con la muerte.

No tenía ninguna enfermedad mental, según el Padre Alt, que afirma que la posesión fue consenso de todos los sacerdotes que conocían a Annelise Michel: “Como su director espiritual desde 1973-1975 no puedo permitir que la terrible posesión y la aceptación consciente que se estableció cómo una expiación por los pecados, se pase por encima como si fuera algún “accidente teológico.” Anneliese Michel estaba poseída. Todos los sacerdotes que participaron: tanto el padre Renz, Fernando Habiger, el padre Karl Roth, el padre Eduard Herrmann, y el experto en casos de exorcismo, padre Adolf Rodewyk, SJ, todos teníamos esta convicción”.

Once años y medio después de su entierro, el cuerpo de Anneliese fue exhumado y sometido a otra autopsia.

Pese a los rumores contrarios y a la existencia de fotos de la segunda autopsia, nunca reveladas, el cadáver mostraba los signos normales de corrupción.

Hay una foto del féretro en la que algunos ven una garra abrazando el ataúd. Hoy, su tumba sigue siendo lugar de peregrinaje para aquellos que piensan que Anneliese fue una valiente luchadora contra fuerzas demoníacas. 

La historia de Anneliese Michel está bien documentado en dos libros: Anneliese Michel: Una historia real de un caso de posesión demoníaca de José Antonio Fortea y Lawrence UE LeBlanc y también El exorcismo de Anneliese Michel de Felicitas D. Goodman.

En película, es archiconocida ‘El Exorcismo de Emily Rose’.
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