La gran mayoría de los arqueólogos siguen asombrados por el sorprendente mundo submarino que existe cerca del archipiélago Ryu Kyu, en Japón.
Fue en 1986 cuando un grupo de submarinistas, descubrieron unas ruinas similares a las de Bimini, abriendose aquí el debate de si se trata de restos de una antigua civilización o bien son simples formaciones naturales.
Uno de los geólogos de la Universidad de Ryu Kyu, Masaaki Kimura, es un experto en el estudio de estas formaciones. Él está convencido de que se trata de restos de una ciudad perdida hace unos 5000 años. Se basa en la datación de las estalactitas encontradas en las cavernas, hundidas al mismo tiempo que la ciudad.
Kimura, además, asegura haber descubierto marcas y símbolos con formas de animales en las piedras.
Encontramos también los restos de un castillo, un arco de triunfo, cinco templos y un gran estadio, todo conectado por caminos y canales de agua, todo rodeado por una especie de muralla.
Los investigadores que apoyan la tesis de la ciudad, creen que pudo haber sido un seísmo, habitual en estas zonas, el que acabó con ella.
El 4 de mayo de 1998, hubo un terremoto que afectó a esta zona, permitiendo descubrir nuevas estructuras, como una especie de zigurats similares a los de Mesopotamia.
Otra teoría dada por el geólogo Teruaki Oshi cree que estas construcciones son anteriores a la era glacial, afirmando que el hombre las construyó aprovechando algunas formaciones geológicas ya existentes.
Cree que fueron originadas en la época en que Japón y Asia estaban unidas, antes de la glaciación, siendo más bajo el nivel del mar, y fue el deshielo el que acabó por hundir esta ciudad.
Por supuesto, también creía que la civilización que existía en Yonaguni era mucho más sofisticada.
Sin embargo, no todos creen que es esta la explicación real. Desde la Universidad de Boston se ha criticado esta teoría, afirmando que son formaciones geológicas.
Yo quiero creer que este es otro caso de una ciudad perdida, quizá tragada por el mar, pues me parece que las estructuras son demasiado "rectas" en algunos tramos, y los ángulos son perfectos. En general, realmente tiene un aspecto de ciudad, y me parece muy difícil que la erosión pueda hacer todo esto.
¿Qué opináis?
Aquí os dejo un reportaje fotográfico:
